¡Minna-san!!!
¡Otsukareina!!!
Siempre que recordamos algo solemos hacer hincapié en lo bueno que tenía. Que si era ésto, que si era aquello. El único problema es cuando empiezan las inevitables comparaciones entre el antes y el ahora de algo que nos gusta. En éste caso específico vamos al antes y al ahora de Morning Musume, el eterno dilema de muchos fans acostumbrados a buscarle tres pies al gato cuando es tan fácil disfrutar del talento de nuestras niñas sin muchas complicaciones.
Pero bueno, personalmente ya aprendí a separar la paja del trigo en casos como éste y ya dejé de estar con eso de "mis Morning Musume de antes eran mejores", cuando eso sólo se presta para empezar peleas y fomentar discordias sin sentido, si bien me declaro como un nostágico de mis graduadas y la verdad no hay nada que me daría mayor gusto que volver a verlas como unas Morning Musume otra vez, pero ya sabemos que eso es en la práctica imposible y en éstos momentos el presente del grupo es muy distinto al que conocieron los harowotas con más de cinco años siguiendo a las chicas, pero la realidad es así, no hay otra.
Ahora el problema de fondo es soportar a cucarachas que sólo saben quejarse de las niñas de ahora y echarle flores a las generaciones pasadas con su consiguiente cuota de insultos, adjetivos humillantes, comparaciones absurdas y todo el arsenal de idioteces de lo que saben ser capaces los extremistas que todo lo ven con el cristal de la intolerancia y lo peor de todo, desde su propia conveniencia.
A veces pienso que la convivencia pacífica de los Momusu fans se basa más en el respeto ajeno, pero al parecer hay quienes ese simple concepto les suena más díficil de entender que el Teorema de Pitágoras o una fórmula de física básica, pues insisten en sus puntos de vista así sean bastante infantiles o que rayen con la estupidez, pues eso de que "las Morning Musume de antes son mejores y las niñas de ahora son un asco" sólo puede venir de una mente cuadriculada y de alguien que no tiene mejores cosas que hacer que malograrse la existencia y de pasadita malogrársela a los demmás.
Así que ya saben niños, nada de estar haciendo comparaciones, éstas son malas, innecesarias y contraproducente. El pasado de Morning Musume fue glorioso, que duda cabe, pero el presente es por demás brillante y a nosotros (los fans antiguos) y a los nuevos fans sólo nos queda disfrutarlo y no ponerle trabas a los que recién conocen a las niñas con tonterías de remembranzas exageradas o desmereciendo el trabajo de las actuales integrantes, que lo quieran o no, son la nueva sangre de Morning Musume, las herederas de un gran legado y dispuestas a hacer historia por si mismas.
¡POR SIEMPRE Y PARA SIEMPRE MORNING MUSUME!!!!!!
Particularmente -y no es para fastidiar- la generación liderada por Ai me parecía mejor. Las chicas tenían mayores cualidades vocales y una mayor presencia en el escenario. La generación actual recurre mucho al modulador de voz, las distorsiones están bien como un recurso ocasional, pero cuando se abusa de él y se le usa durante toda la canción y en casi todas la canciones del grupo no me parece bien. Las chicas podrán no tener las vices potentes y melodiosas de las generaciones de antaño, pero estoy seguro que cantando con sus voces verdaderas no lo harían mal. Precisamente lo que más me gustaba de Morning Musume era la melodia de sus voces, asi como la sincronía casi perfecta de sus coreografías. Ojalá cambie.
ResponderEliminarSin ánimos de fastidiar.
Saludos.
César.