lunes, 7 de febrero de 2011

¿Y ahora qué?

Bueno, antes de comenzar a escribir los posts correspondientes al día de hoy quería explayarme un rato y es lo referente a mi situación actual.

Bastante golpeado después de la muerte de mi madre (que raro suena eso), a veces me pongo a pensar que hay cosas para las que no estás preparado, bueno supongo que nadie lo está, y menos para afrontar ese extraño fenómeno que llamamos muerte.

Aunque otros dicen que es parte de la vida o parte del proceso de maduración de uno mismo como persona, a mí me sigue pareciendo extraño, eso de llegar a mi casa y no encontrarla, creo que nadie está listo para soportar semejante dolor, yo personalmente desde que mi madre se enfermó, dizque me preparé mentalmente para lo peor ¿y quieren que les diga algo? es la peor estupidez que uno puede pensar, creer que porque lo piensas es igual a cuando lo pasas, y no, no es igual, nada se compara al dolor que sientes en ese momento, aunque ya hayan pasado dos meses, el dolor sigue ahí, y cruel paradoja de la vida, ese dolor sigue vivo mientras mi madre ya descansa.

Hay momentos en que he querido dejar todo o tirarme al abandono, pero lamentablemente te estrellas con un sólido muro llamado realidad, que te obliga a volver a poner los pies en la tierra pues hay un trabajo, familia, amigos, gente que te quiere y te aprecia y si algo bueno he sacado de ésto, pues aunque no lo crean, hasta de la peor desgracia se saca algo bueno, como cuando ocurre un terremoto y después del escenario de destrucción, lo lindo que es ver a seres humanos preocupándose por otros en una interminable cadena de solidaridad, pues en mi caso pasó algo parecido, después de encontrarme en lo más profundo de mi hoyo, me salieron amigos hasta debajo de las piedras a darme ánimos, una palabra de aliento, alguien que seque mis lágrimas, en fin, encontré el apoyo que necesitaba para superar ese momento, en especial de mi familia y de mis amigos, a los que agradezco de corazón por todo lo que hicieron por mí en esos oscuros momentos, cuando más sólo me sentía (y aún me siento), cuando más desamparado me encontraba y me hicieron ver que a pesar de todo la vida continúa y a mi madre no le hubiera gustado verme derrotado, aunque aún llore a lágrima viva cuando voy a verla al cementerio y aquí viene otra cruel broma del destino, cuando mi madre vivía nunca le dí ni una florecita por su cumpleaños o algo, ahora tengo que llevarle flores a su tumba y eso hace que me sienta el peor y más despreciable de los seres humanos, aunque quizás mi madre me dé una sonrisa que no puedo ver y me diga "no te preocupes hijo, de todos modos nunca me gustaron las flores"

2 comentarios:

  1. ._. que triste.

    Fuerzas tenshi yoshizawa!!!
    Ganbare!!!

    Eh pensado en tu post u_u me voy a preocupar un poco mas por okasan. Tratare de no hacerla enojar mucho, en mi mundo familiar tan limitado seria lo peor perderla.

    Animo!!

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  2. gracias amiga, cuida mucho, engríe y ama mucho a okasan, no sabes lo valiosa que es y lo que te a hacer falta el día que no esté T-T

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