domingo, 24 de septiembre de 2017

Y el sueño se hizo realidad.






¡Minna-san!!!

¡Otsukareina!!!

Una vez escribí algo sobre esa perniciosa costumbre de estar mandando por la puerta de atrás a las chicas del grupo de entrenamiento del Hello! Project, conocidas como las Hello! Pro Egg, ahora Hello! Pro Kenshuusei. Una tras otra iban desfilando por la puerta falsa las chicas, que si bien algunas tenían la suerte de formar parte de un proyecto en el Hello! Project, la mayoría terminaba buscando chamba en otro lado. 

Cuando pasaron a llamarse Hello! Pro Kenshuusei, como que las cosas no mejoraron mucho, pues las cosas seguían el mismo sino, pero hace cosa de cinco o seis años, se produjo una especie de apertura en la decisión de no tener a kenshuuseis en grupos mayores y lo que comenzó como un experimento con el inicio de funciones de grupos como S/mileage, ahora ANGERME y la inclusión de chicas del grupo de entrenamiento en Morning Musume (Fukumura en la 9na. Generación, Kudo en la 10ma. y Oda en la 11va.) se tornó de pronto en un vendaval de ascensos, lo que provocó la aparición de grupos como Juice=Juice, Kobushi Factory, Tsubaki Factory y el renacer de las Country Musume, que ahora pasarían a llamarse Country Girls, grupos que tendrían al grueso de sus integrantes provenientes de sus canteras y para beneplácito de los fans, que ya tenían nuevas chicas a quien apoyar y adorar.

Pero a pesar de todo, aunque muchas chicas del grupo de entrenamiento ya habían pasado a formar parte de grupos importantes de la factoría, habían dos muchachas que aún estaban en compás de espera y viendo como se iban retirando integrantes valiosas, dos muchachas que a pesar de sus pergaminos y de los años de trabajo que tenían en las Hello! Pro Kenshuusei, los altos mandos se negaban a darles la oportunidad de debutar y corrían el riesgo de seguir el camino de grandes integrantes como Kaneko Rie, Tanabe Nanami, Hashimoto Nagisa o Yokugawa Yumei.

Y sobre todo, el temor era mayor en Ichioka Reina, con más de cuatro años de servicio y con 18 años a cuestas, veía muy lejano el ansiado debut. Danbara Ruru, también con casi cuatro años en las kenshuusei también parecía estar lejos del debut, a pesar de haber ganado dos veces el concurso interno del grupo de entrenamiento. La única que parecía un poco más relajada era Kawamura Ayano pues ella a lo mucho recién se iba para el año de servicios.

Pero llegaría ese bendito 5 de mayo, cuando en un anuncio sorpresa, se reveló que las próximas en debutar serían precisamente, Reina, Ruru y Ayano, lo que provocó el estallido en lágrimas de las tres, los aplausos enfervorizados de los fans y la emoción de sus compañeras. Demás está decir que las lágrimas de Reina y Ruru las hice mías, pues esperé pacientemente por el debut de mis dos ases de las kenshuusei y aunque aún espero el debut de Inoue Hikaru, Horie Kizuki y Takase Kurumi, por el momento estoy satisfecho con el debut de mis dos niñas.

Y así pues gentita, la larga odisea por el debut de Reina y Ruru tuvo un final feliz, pues Ruru pasó a filas de las Juice=Juice, Reina se convertiría en Líder de un grupo próximo a crearse y Ayano pasaría a formar parte de ANGERME, el escuadrón de locas por excelencia. 

Por eso niñas y niños, nunca hay que perder la fe, las cosas buenas llegan, sólo hay que tener paciencia.

Reina y Ruru son el mejor ejemplo de eso.

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